¿Qué es el Test Fit?

Un término cada vez más usado en arquitectura y construcción es el Test Fit. Pero ¿qué es, en qué consiste y por qué usarlo? Te compartimos sobre esta amigable solución.

De forma resumida el Test Fit es un proceso de análisis que se utiliza para que —de manera preliminar— se pueda visualizar el uso de un espacio. A su vez, esto permite tomar decisiones y obtener un diseño mucho más alineado con los gustos y necesidades del cliente, tanto como al tamaño del lugar, probando que todos los componentes encajan dentro de este espacio. Se realiza en conjunto con el diseñador y el cliente, dando como resultado un diseño más eficiente y mucho más claro para un cliente especifico.

Es importante comprender los requerimientos de espacios del cliente y, de igual manera, entender la operación diaria para que el diseño sea cónsono con la operación de la empresa, que es exactamente lo que se busca lograr a través de un Test Fit. También ayuda a utilizar los recursos de una remodelación, un espacio en gris o una nueva oficina, contribuye a utilizar el presupuesto de la forma más eficiente, previendo todos los detalles y requerimientos, ya basados y alineados con la operación de la empresa que estará en ejecución en ese nuevo espacio.

En nuestra experiencia en proyectos comerciales, especialmente en el área de oficinas corporativas, hemos tenido la oportunidad de experimentar cuánto valor brinda este proceso al ayudarnos a comprender de forma clara lo requerido por cada uno de nuestros clientes y evitar dejar escapar detalles que sólo se podrían ver ya encontrándose el sitio en operación. También influye en la fase de diseño esquemático ya que todas las partes ponen a prueba y examinan el plano espacial.

El tomar la decisión de ejecutar un proceso de Test Fit siempre es una buena idea, es un proceso sencillo y rápido que brinda mucho, dándote una idea clara de la funcionalidad de tu futuro espacio de trabajo, sin costos exorbitantes.

¿Que necesitas para iniciar este proceso? Una vez tomada la decisión de llevarlo a cabo, sólo necesitas:
→ Planta arquitectónica vacía para utilizar de base;
→ Requerimientos esenciales del cliente en cuanto a espacios;
→ Metraje aproximado por espacio (si se cuenta con este dato);
→ Organigrama de la empresa; y
→ Contacto con la persona en la empresa que ve y entiende las operaciones diarias.

En conclusión, una vez realizado un Test Fit, los involucrados pueden ver, reaccionar y responder al plano espacial previo a un diseño final y ayudar a guiar todas las soluciones para la completa funcionalidad del futuro espacio de trabajo.