Nuestra experiencia con losas postensadas

Son muchos los cambios en los sistemas constructivos que se han dado en el tiempo y las losas de concreto no son una excepción, logrando implementar eficiencia a nivel estructural. Es por ello que en este artículo les hablaremos sobre sus características y aspectos más relevantes, contados de la mano de la experticia de nuestro equipo de ingenieros.

Sobre las losas postensadas, podemos resumir, que son un sistema constructivo compuesto de acero de alta resistencia, dispuesto de acuerdo con una configuración parabólica, previamente analizada, y diseñada por un ingeniero estructural, considerando el uso de la estructura particular.

Es a través de cables dentro del concreto, que son ancladas mediante cuñas a sus anclajes (vivos o muertos) en los extremos de las losas y, posteriormente, son sometidas a una tensión determinada. A este procedimiento se le llama tensado de losa en donde se inducen pre-esfuerzos internos, opuestos a la aplicación de las cargas y que ayudan a que el efecto se minimice al ejercerse cargas sobre las losas y se ejecuta, una vez el laboratorio de control de calidad, valida la resistencia mínima de diseño del concreto, requerida de acuerdo con planos. Esta resistencia es esperada a los tres días.

En Mar Azul, nuestro servicio de inspección se encarga de verificar y validar cada proceso al momento de los tensados y, previamente que el laboratorio brinde y entregue la resistencia del concreto, información que se obtiene al momento de la toma de la muestra de concreto correspondiente al vaciado de cada losa. Dentro de las revisiones que se realizan, otra muy importante es la calibración de los equipos; una vez revisada y que cumpla, se da la autorización para proceder con el tensado.

Un sistema postensado se puede utilizar para edificaciones de uso comercial, habitacional, losas de cimentaciones, losas de estacionamiento y otros usos industriales.

Son muchos los beneficios de las losas postensadas. Les compartiremos tres que consideramos aportan gran valor y los revisaremos de forma comparativa al sistema tradicional, como lo es una losa reforzada:

Iniciando, una losa postensada reduce significativamente los tiempos de construcción, ya que pasados tres días y realizado el tensado, se puede desencofrar la losa. Ahora, veámoslo en una la losa reforzada, la cual se requiere esperar aproximadamente un mes para poder desencofrar la losa.

Como segundo beneficio, podemos resaltar que la estructura es mucho más liviana, permitiendo también que la losa pueda ser más delgada, lo que impacta directamente tanto en un ahorro en el concreto, como en la cantidad de acero, además de permitir mayores claros, luces o espacios entre apoyos. En una losa reforzada, su peso es mayor, tanto por la cuantía de acero como por la cantidad requerida de concreto y los claros no pueden mantener tanta distancia como en una losa postensada.

Y, como tercer punto, la losa reforzada brinda también una mayor flexibilidad de diseño. A diferencia de una reforzada, que requiere mayor análisis para losas con formas menos tradicionales.

Además, al momento de realizar la compra de los cables, es importante tomar en cuenta que estos deben cumplir con lo especificado en planos y con las certificaciones respectivas del producto, de acuerdo a normas, para así estar seguros de que estamos seleccionando materiales de calidad. Similarmente, para la instalación, se debe contar con empresas con experiencia previa y, por ende, verificar que todo el equipo esté en buen estado y debidamente calibrado con sus certificaciones de calibración correspondientes.

Ya sea disminuyendo el agrietamiento natural del concreto, ahorros en materiales y mayores claros entre apoyos, son todos buenos ejemplos de beneficios que podemos obtener mediante el uso de losas postensadas, y esto, a su vez, permite el mejoramiento estructural; una real evolución en cuanto a opciones de losas se refiere.